siniestros sentimientos ¿ á que presentarse como á representante de una de las comisiones para seguir adejanfe el proyecto qlíe ci mismo detestaba ? Sin embargo, la comisión olvidando un _ proceder de (juo á no ser su gran cordura, no podía prescindir, creyendo que el capitán Scrra no se negaba á sus justos deseos por ningún fin particular, si que tai vez por alguna^ de aquellas etiquetas que tienen á veces ios hombres , se retiro ; y á Ja media hora ; creitla que habría dado el suficiente tiempo al capitán , para reflexionar el modo tan irregular con que había procedido con Ja misma , se le presentó por segunda vez y le manifestó lo mismo a que iba. Entonces fué , cuando el citado Serra se aderió á su demanda. La comisión entró acompañada del mismo para hablar á la compañía, y si entre la misma se suscitaron algunas disputas, las que privaron por aquel entonces á la entendida , el evacuar sus encargos : fueron originadas por las expresiones que solió uno de los oficiales de la citada compañía. Si de esto se siguió la ocurrencia que es desagradable al indicado capitán, ¿áque hacer caraos A la comisión? Si la misma entró á hablar á la compaíua con unión y permiso del Sr. de Sena ¿á que decir en su oficio que pasó á ejecutarlo á pesar de su oposición? Diga en hora buena el citado, que cuando vió movidas Jas disputas abandonó á su compañía y que la comisión salió tras él para manifestarle lo mal que había procedido. Confiese también que la compañía viéndose abandonada de sus j. oficiales creó una comisión áíin que la dicha volviese á entrar y expusiese el objeto á que se había presentado : mas nunca suponga en cubiertas expresiones que los Sres. Gibert 7 Galíndo, y V\'Á, sembraron la discordia en su compañía. Sírvase V. disimular nuestra molestia; y esperando insertará en su periódico este nuestro escrito quedan de V. S. S. S.= Francisco Gibcrt = José Galindo-José Ignacio Plá. ■ ■ i ■ IMPRENTA NACIONAL DE LA ÍÍEREDEKA DE DOKCA.