m JA/./ MACA/INI-. Septiembre-Octubre 1935 í í tf.os PinfiüinoS' Ld Inaoflurabión de Ib lemporndd dí invierni) hn venirlo u eonSrmar lo expuesto en mi anterior articulo. Bn los suntuosos locales de nuestra ciudad principalmente, vuelven a aparecer las orquestas, magnillcas de espirilu y de facultades. En la BlieiM Sombra. «Matus Bands y los (M» cosechan aphiusus; en el ExCtltiOt, las urqueMas cCaaánoVM y Oliva» siguen con sus éxitos; en el l'alcrmo, Snro y sus Girla Sinfónicas, junto con «Montoliu Ja/./.»; en el l.yan d'Or, «Nevada Boya» (de reciente formación); en HoUVWOOd, «Demon's Ja/./.»; en la (¡ranja Hayal, los «Crazy Boys»; eu la Iztiuicrdu, los «Napoleiiu's», en el Monaco. fLos Pingfiinos». etc., etc.. lodos reverdecen los laureles conquisladns en anteriores temporadas. De estas orquestas, hay una, «Los Pingüinos», de reciente formación, que ha adquirido en poco tiempo un envidiable prestigio, yueriamos inquirir «le su director, el (Secreto!* de tal encumhramienlo y nos dispusimos a montar la guardia en el Cabaret «Monaco». Presenliamos que una conversa- | Azúcares • Tés • Chocolates - Bombones - ■ , ■ ■ • ■ | EipaclalUad •a cafés tostados al aa- ; tural. de cobecha propia I JUAN QARRIGA I ■ Prccloi limlladoi par* ; liar** y Cafél - Se ilrva a do. nidio j j Hospital, 26 • Teléf. 204S2 ■ BARCttONA i l • ción con Antonio l'dinu, no seria cosa llana. Como primera providencia, pregunUÜños a un empleado que en la puerta del local Ostentaba un magnifleo uniforme con dislintivo del Cabaret «Monaco», por el director de la orquesta. Nos dijo que no estaba. Y nos lo repitió hasta cinco veces, en diferentes ocasiones. Por fortuna y cuando, después de la quinta negativa, nos disponía mos a ir en busca de Ldimi en SU propio domicilio, llegan a nuestros oidos los acordes de un fox Ante DUestrtl mirada interroMati va, el empleado nos presenta sus i X Cusas basadas en el mol d'ordre. recibido del chef d' ore he ni re, de (pie nadie inlerrumpa los ensayos. Exhibimos nuestro carnet de Prenai) y luego de asegurarle «pie nada había de ocurrirle por nuestra culpa, venios, por fin, franqueada la entrada en el salón. La orquesta está en pleno ensayo. Se suceden los números sin descanso, minuciosamente cuidados, y pasado un largo espacio de tiempo, mi director artístico, Antonio í'dina. me atiende. Lámenld — dice — la lata que has tenido que aguantar. Pero te habrás dado cuenta, en el curso del ensayo, que, para nosotros, la seriedad en el trabajo constituye nuestro lema principal. —i...? — No; hace sólo tres meses que está constituida. — ¿...? — Nuestra orquesta es... como le diré... Es algo asi como una entidad legalmente constituida. Tiene nc sus Estatutos, su Caja y es regida por un Consejo de Admlnla tración nombrado, naturalmente, por la orquesta de entre sus miembros. — ¿...V — Su composición es la siguiente: Saxofones: Joaquín Subirá (saxo, clarinete, piano, violinl. Manuel Vilasaió (saxo, clarinete, bandoneón, cello, cantor) v J. M." Ballester (saxo. clarineic. bandoneón, \ iolin). Metal: Luis Duque (trompeta, violin, drnms). Jaime Kilialta (trompeta, violin, piano), y Antonio Duque (trombón, violin). Bitmo: Antonio ('dina (piano, arranyer. director), Hamón Domin gUCI (bajo, taba, manager) y Avelino Prals idrums). — Amigo Ldina. lo que sorprende de vuestro conjunto, es el prestigio que habéis alcanzado en poco tiempo. ;, A qué crees debida esta causa? — No puedo atribuirlo a nada más que a nuestro esfuerzo perso nal. Atentados por los aplausos ron que el público premio nuestras primeras manifestaciones, hemos venido ensayando y estudiando diariamente a lín de lograr la indispensable compenelracíon de las secciones. Poseemos ya un buen repertorio, cuidadosamente prepa rado que vamos ampliando cada dia, y no queremos cejar en el empeño puesto va desde un prin cipio, de llegar al completo logro de nuestras aspiraciones. Felicité a Antonio I'dina por las simpáticas directrices que liab'id sabido imprimir al conjunto que acaudilla, y me despedí pensando que la continnidad en el esfaerso y la voluntad de triunfar son dos factores indispensables en toda empresa. He aquí demostrado tal aserto por esta orquesta, que a los tres meses de actuación ha sabido conquistarse la estima y el aplauso del público selectisimo que acude todos los dias al Monaco, lie aquí, pues, una clave segura de éxito que deben adoptar lodos los conjuntos que se precian de progresivos. P. COLOMINA 07^ 'Toyas para fiestas^ JyS [6 mayores 1\ LA DALIA BLANCA . Bürb«rB, 2 - Tel. 21*00 . BARCELONA «-so'i