LA JORNADA DEPORTIVA Acotaciones a los últimos maichs HERCULES REDIVIVO Si muchas veces se ha empleado !a imagen, al comparar a un equipo, que no tiene ante si enemigo apreciable, del ga lo que juega con el ratón, nun oa estará más en carácter qu" a)i hablar de los rojos deil Spai - la puestos enfrente de nuestros blanquiazules. En estos partidos íbamos simplemente a saboraar el juego del Sparta, y contábamos también a emocionarnos con el de Zamor;\, cosa que no ocurrió el año penúltimo en el Estadio ante el mismo equipo de Praga. Si faltaba aigo, que no lo necesitaoms, para convencernos de que Zamora es cantidad y calieíad a la vez. Algo axtraorilinariu hubiera bastado el primer partido jugado con los c-hecos. Eué Oamenlable de veras que el lunes no pudiera repetirse de veras este duelo dasigual. que tal vez no sea fácil ver de nuevo. Ahí es nada, ver encarados a ocho hombres de la categoría d'e los campeones checos con nuestro guardamenta. Repetir de nuevo la hagaña de Hércules... con ocho Táseos, y salir airosísimo de la prueba. Estos partidos del Español contra el coloro, nos han hecho desear vivamente que de veras se lleve a cabo el match entre de ciudades de Praga y d'3 Barcelona. ¿De qué no va a ser capaz un equipo nuestro teniendo a Zamora en la puerta? ¿Y si la palabra imposible no existe para nuestro enorme "goaJlkeeper", cómo dudar de que al defender los coloras de nuestra ciudad no llague a hacer más de lo que hizo el domingo? Que venga pronto osle encuentro, que no ha de ser muy difícil de organizar según los mismos checos, y, o mucho nos engañamos, o ha da ser si "non plus ultra" de lo que nos fallta ver y sentir en materia de fútbol. El verdadero ideal Dijimos ya que el juego del Sparta do la concreción de todas las bellezas que pueden ser sentidas en fútbol, y aña- rfimos que, sin disputa, el jue go checo ha de ser tomado ca si como eil verdadero ideal a alcanzar. Si hay algo verdaderamente admirable es la síntesis que cada jugador representa de todas las posibles cualidades que cabe desear en él. No hablemos ya de su preparación (écnica, de su sentí - t.ido de la colocación, de su impetunsiilad, de sn idea de la laCaialana SICCIÓ D'BSPOBTS Sastrería Sabaferta Gor res Camisería ss-calie ttleae-40 BARCELONA (f am ) rísticas. Aunque sea eonti nuando nuestro Juego pura nientte meo-idronal. . . El juego estético de los Amateure Tras del ditirambo, que iba aumentando nuestras ülusio nes, vino la decepción. Y es lan chfícil reaccionar contra la misma, si no ss ante enér- UK LA VICTORIA DEL EUROPA SOBRE EL N. A. O., DE BREDA l'n ummenlo de apuro riel giiiuflamp ta holandés Van der l'oel.CPoto Gaspar.) compenetración de esfuerzo; fijémonos en otra cualidad que falta generalmente a nuestros jugadores, y en la suma inteligencia qué demuestran siempre viendo la jugada cabalmante adaptada ail momento. Habilidad y destreza personajes, sobriedad en la acción individual, arrojo insuperable, inteligencia y precisión, rapidez hermanada con la efectividad del juego de conjunto. ¿Cabe pedir más? Si nosotros nos aoercabos tan sólo a esta síntesis, poseyendo como poseemos esta modalidad inigua lada deil juego de cabeza que tan peligrosos hacen a nuestros delanteros, y que tan bri liante es, que no resultaría de la belleza y de la potencia de nuestro fútbol. Comprendemos que es pedir demasiado. Es el verdadero ideal, y ésta rara vez se ailcanza. Más vale que empecemos por el principio haciendo a lia par que técnicos, hombres fuertes capaces de dar al juego este carácter de fuerza que con la habilidad TOn sus más bailas oaracte- gicos estumulantes, que aun habiendo hecho una buena exhibición el domingo, los Amateure no nos han producido la gran impresión que esperábamos. Por de pronto, en este segundo partido demostraron ser un excelentísimo equipo, pero no llegaron todavía a colmar Ho que, sugestionados por su fama, les exigíamos. Cuando hicieron los Amateures" áu último viaje a Suecia, los periódicos hablaron de ellos como de un equipo que jugaba un fútbol ultra estilizado, es dacir, la belleza del juego en toda su esencia. ¿Habrá sido íal vez Ha recien - tísima visita del M. T. K. cuya impresión de juego hábil, puloro y bello, guardábamos tan fuertemente en nuestra ratina, lo que ha hecho que nos sintiéramos desilusionados? ¿Será imposible que los vieneses puedan mostrarse en grandes artistas ante nuestro juego ultra rápid'o?' TaJl vez ambas cosas hayan influido. Acaso también la falta de Kalman Konrad y el no estar en forma otros jugadores. Sea ío que fuere, es de lamentar qu»no hayamos podido ven&s en su planitud de medios. Sm embargo, es de reconocer qu'') su línea de ataque, oon au juego sobrio y efectivo, praolicando indistintamente con rari perlección el juego de interiores y 311 juego de alas, rematado siempre con gran oportunidad, es muy notable. Aunque se hayan marchado muy condolidos, a nuestro Juicio sin motivo súdente, es de esperar que «n otra ocasión podamos apreciar las b?ltezas de su estilo ^n condiciones normales. Rozaduras del match Nuestro querido amigo y colega doctor Willy Meiz4 h'a tonide para el segundo partido "Amateure-Barce'oiia" unos comentarios que nos parecen excesivamante crudos y apasionados. Se queja amargamente d; la actuación cíe algt.nos de lo^jugadores d'e! Barcal ma, (Saniilior, Blanco, V. Martínez), para deducir que el /-arlLdo se confundió con una corrida de toros, en la cual actuaron aquéllos da picadores y de banderilleros. No creemos que sea para tanto; ni negaremos que hubo "fouls", claramente intencionados, por parte de alguno de ellos; pero tampoco los "Amateures" presoindir1ron de los mismos, mejor dicho, algunos de sus jugado res. Y a nosotros no se nos ocurre englobar en la consua todo el equipo, sino que etí "Amateure" continua teniendo la tradición da un equipo de juego correctísimo. Claro, que esto d'el juego su ¬ cio, excepcional, ocupa para los vieneses el primer lugar, y sirve de pretexto para desvirtuar el resultado. Pero hay un hecho de alta signicación. y es que antes de ocurrir ej choque de Hilte y V. Martínez, que dió lugar a la momentánea retirada del equipo por suponer la entrada da éste hecha con la intención de inutilizar al jugador austríaco (opinión que nadie puede compartir sinceramente), ya se habían hecho dos goafls an los cuales no cabía discusión posible. Que se arguya que en el equipo estaban tres suplentes, nos parece razonable; que. se haga constar que estaba handicapado por lesionas d