Año III. Barcelona 7 de Marzo de 1875. Núm. 8. PUNTOS DE SÜSGRICION: barcelona Trill\ y Serra, calle Escudillers, 85. MADRID HIJOS DE FÉ, JACOMETREZO, N.0 44. RESTO DE ESPAÑA PRINCIPALES LIBRERÍAS. REDACCIOS í ADMINISTRACION: ESCUDILLERS, NÚM. 85, BARCELONA. n l'líECIOS DE SÜSGRICION: ESPAÑA. 1G REALES CADA 12 NÚMEROS. pagados por snlicipado. NÚMEROS SUELTOS 2 REALES. ULTRAMAR. 24 NUMEROS 50 REALES FUERTES. LA MADEJA. VISTAZO. Todos los periódicos vienen clamando contra la empleomanía. Pero en este punto son en España estos clamores vox in deserto. Pasan dias, meses y años é irán pasando hasta siglos y en esto los españoles serán siempre español ísimos. Esto, ó cosa semejante, dijo un escritor de antaño, y si ninguno lo hubiese dicho, lo dice un servidor de ustedes, que no ha sido ni es empleomaníaco, y pide á Dios que le conserve ■en este punto el genio y figura hasta la sepultura- Creo yo, y dígolo, porque si mi creencia es errónea se me convenza de lo contrario, creo, repito, que el mal no está tanto en los que buscan empleos, como en los que los dan. Mas claro: el remedio deben proporcionarlo los que dan los empleos y no hay que esperar que aquellos que los soliciten se mediquen ásí mismos. Mientras no se coja el asunto por la inversa de lo que generalmente se ha hecho, el mal ántes tomará mayores proporciones, que menguará. La inversa es: que asi como se buscan y crean empleos para colocar á fulano ó á zutano, se busque á este á aquel para colocarle en tal ó cual puesto. Solicita uno un empleo y se busca el que se considera que él es capaz de desempeñar, y debería buscarse á un hombre que se supiera que es capaz de desempeñar un empleo determinado. «El ministerio, dice un periódico, ha dirigido una circular á los gobernadores para que propongan en terna las personas que hayan de ser agraciadas con destinos en las respectivas provincias. Es la única manera, añade el colega, con que el gobierno ha creido poder librarse de los infinitos compromisos que le asedian y así lo manifiesta un diario oficiosos No sé ver hasta qué punto es esto un remedio al mal, pues si el gobierno tiene oompromisos, en igual caso se encontrarán los gobernadores. Solo tenemos que los compromisos han pasado de unos á otros, pero no dejan de existir. Mas propio nos parecería que se prescindiera de compromisos y se buscaran personas idóneas para los cargos que hayan de confiarse á uno ó á otro. Esto, salvo mejor parecer. Protesta enérgicamente El Diario Español contra las escitaciones de La España Católica al gobierno para que haga tabla rasa de la libertad de cultos por ser el principal elemento que mantiene la guerra civil. Dice el colega: «¿Qué les importa la religión á los carlistas, á esos desalmados que quebrantan todos los mandamientos de la ley divina, asesinan á los heridos y á los prisioneros, incendian el hogar del ciudadano pacítico, y viven, por lo general, del pillaje y del saqueo? Pues qué, en ocasiones, ¿no han profanado los templos de Dios, haciendo de ellos cuadras para sus caballos? ¿No sabemos que alguna vez han disparado sus armas mortíferas contra los ministros de Dios que iban á llevar' el consuelo de los últimos sacramentos á los soldados moribundos en el campo de batalla? ¿Querrá sostener el colega que son esos foragidos jos defensores de la religión, y que por ella, y nada más que por ella, han empuñado las armas y procuran arruinar á su propia patria?» En 1834 ni en 1845 habia libertad de cultos, ni registro civil, ni matrimonio civil, y sin embargo, hubo carlistas: ¿les guiaba entonces el amor á la religión y el deseo de establecer la pureza de la unidad católica?» No: el principal elemento que mantiene la guerra civil es la terquedad de don Gárlos y la de sus consejeros, nacida de la ambición de aquel y de estos. Queriendo el rey de los belgas mostrar una vez más su respeto á la ley general del país, hizo que los nombres de su hija y yerno, recientemente enlazados, como los de todos los ciudadanos, se inscribieran en el registro civil y en la lista que se fija en tales casos en la puerta del ayuntamiento. Así que figuraban en esta lista, los siguientes nombres y otros muchos: Fharian Abs, mayordomo, con AgnesSchiffer, cocinera. S. A. R. el príncipe Fernando, Felipe Rafael de Coburgo y Gotha, con S. A. R. madama la princesa Luisa, María, Amelia. Isidoro Fuchs, hortelano, con Augusta Weinbrenner, de profesión desconocida. Etc. etc.. Este ejemplo de igualdad ante la ley, honra en gran manera al rey de Bélgica. Partolo. ENREDOS. Villalva, dos grandes cuadros con multitud de retratos en fotografía de los principales tomadores, rateros, estafadores y gentes de mal vivir de aquella villa. Este trabajo, es principio de un plan concebido por el señor duque de Sexto, y se debe á la habilidad y desprendimiento del fotógrafo señor Mon, que se ha ofrecido á desempeñarlo grátis, pasando, para darle comienzo, largos ratos entre las gentes que le servian de modelo, en sitios donde le ocurrieron lances dignos de contarse, entre los cuales no es el ménos notable haberle escamoteado el reloj, llevando el gabán abrochado, y manifestándose el artista algo mohino por ello, uno de los presentes le dijo: — No se enfade usted, que esto no es más que para que juzgue la habilidad de las personas que le rodean. Con episodios semejantes, y pagando el alboroque á varios que no se prestaban de buen grado á perpetuar su imágen, ha conseguido el señor Mon ejecutar una obra esmerada. Y si quiere el señor Mon un consejo de amigo, á fin de que no vuelva á ser víctima de ios rateros, preséntese en traje de gladiador cuando vaya á retratarlos. Cree un periódico que para conseguir el triunfo sobre el carlismo, se necesita del entusiasmo liberal. No lo diría de otro modo Pero Grullo. Según manifiesta «El Tiempo» hay en el despacho del gobierno civil de Madrid, señor En Sevres, población de Francia, parece que se va á establecer una escuela de mosáicos, á fin de que los arquitectos puedan utilizar este importante medio de decoración de los edil!-, cios. Recomendamos esta escuela á nuestros arquitectos, por si les parece que puede serles provechosa. Pues señor, los premiados en la lotería de Navidad, continúan sin haber cobrado sus premios. La causa no puede ser otra que el deseo de que no cojan de sorpresa á los agraciados las cantidades que deben percibir. Vaya, que con dos meses y pico, hay el tiempo suficiente para que los tenedores de los billetes premiados hayan podido prevenirse. Telegrafían de Jerusalem, que los griegos han atacado á los armenios en Belén, habiendo de una y otra parte muchos muertos y heridos. Entre los griegos y armenios, montenegrinos, carlistas, los indios et sic de cceteris... el mundo es una delicia.