86 La Academia Calasancia Expuestas la equidad del salario familiar y las Ventajas que su implantación reportaría, débese conocer la manera de alcanzarlo, haciendo práctico lo que hasta ahora ha sido simple tesis, y, antes de hacerlo, distingamos las diferentes formas de salario familiar, manifestando cual sea para nosotros la verdadera. Tres son esas formas: la primera el salario familiar relativo, que no puede aceptarse por perjudicar en Vez de favorecer á la sociedad, pues á las familias numerosas les sería difícil el hallar trabajo; la segunda es el colectivo, desechable por incluir entre los que deben trabajar á la mujer en contra de lo manifestado, y la tercera el absoluto demasiado riguroso, pues excluye hasta el trabajo de los hijos, y que, si es en teoría aceptable, no es realizable en la práctica. El que para nosotros es conveniente es el salario familiar mixto, formado del absoluto sumándole el trabajo de los hijos y del colectivo restándole el de la mujer. Expuesto ya el salario, á nuestro entender aceptable, examinemos los medios de obtenerle. Del precio que en el mercado alcancen las cosas exige la justicia conmutativa que se repare en forma de salario el precio del trabajo del obrero y el interés que corresponde al capital, y, después de descontadas esas dos cantidades, queda siempre un beneficio que el empresario hace suyo además del salario que por su trabajo intelectual le corresponde. De ese beneficio, pues, debe el patrono sacar lo suficiente para elevar el justo salario en salario familiar. La forma de elevarlo es indiferente; puede hacerse directamente, añadiendo al salario una cantidad mayor ó menor, ó en formas indirectas, entre las cuales hay la de participación de beneficios, preferida sobre las demás por muchos economistas y que consiste en que el obrero tenga una participación en las ganancias de la empresa, lo que logra que éste, considerándola como suya, redoble, para engrandecerla, sus energías, á fin de percibir más beneficios, lo cual favorece mucho al empresario. Otra forma indirecta, variación de la anterior, es el sistema irlandés, que, en vez de aumentar con metálico el salario, da al obrero sus ganancias en acciones de la industria ó de la empresa. En resumen: sea en la forma que se quiera, debe el patrono en muchas ocasiones, para retribuir convenientemente al obrero, desprenderse de ganancias legítimamente suyas, si quiere, aun á costa de sacrificios pecuniarios, conservar la tranquilidad social y su propia seguridad, para que, si ayer dirigieron las airadas masas sus.furores contra conventos é iglesias, no los dirijan mañana contra palacios y fábricas. Juan Marí Académico Supernumerarfo ■